Día 10

La Iglesia Como Casa, Que Se Manifiesta A Través De Actos De Amor, Perdón, Justicia Y Honra.

“y ustedes también son parte de este edificio y se convierten en morada de Dios, a través del Espíritu.”

Gracias a la ayuda del Espíritu Santo, el regalo de Dios, podemos experimentar la presencia de Dios en nuestra vida. Ese Consolador, nuestro Ayudador, con el cual fuimos sellados (Efesios 1:13). La maravillosa bendición que nos dejó Cristo al declarar que no estaríamos solos y que Él nos recordaría todas las cosas que nos ha enseñado. (Juan 14:16-26)

Santiago 4:5 dice que “El Espíritu que Dios ha hecho morar en nosotros nos anhela celosamente”. Tú y yo somos la iglesia, el lugar donde Su presencia habita y donde somos enseñados. Es en la casa de Dios donde somos formados, discipulados y donde aprendemos a vivir según el corazón de Dios. Nosotros, como casa de Dios, debemos reflejar Su amor, perdón, justicia y darle honra en todo lo que hacemos. En cada acto de bondad, con cada palabra de perdón y cada gesto de justicia, mostramos al mundo quién es Dios y cómo Él nos llama a vivir.

En esta casa, todos somos importantes, y al vivir de acuerdo con Sus principios, construimos una comunidad sólida, un lugar donde Dios se glorifica a través de nuestras vidas. Cada uno de nosotros, al vivir en amor y unidad, está construyendo esta casa para que se mantenga firme y fiel a Su propósito, y sea una casa deseable donde manifestar Su presencia en cada acto de amor, perdón, justicia y honra. (1 Pedro 4:8-10)

Debemos proveer para las necesidades de la casa de Dios mediante disciplinas espirituales como la vida de oración, el estudio de la Palabra, tiempos de adoración y alabanza, honrando a Dios con nuestros diezmos y ofrendas, y con una búsqueda apasionada y consciente de renunciar a todo lo que evita que Su presencia habite libremente en nosotros. También debemos atender las necesidades de la iglesia mediante la provisión de alimentos, tiempos de comunión, cuidándonos los unos a los otros, y viviendo en unidad como un solo cuerpo.

Cómo lo vivimos en la vida personal:

  • Reflejar Su amor y justicia en las relaciones personales: La iglesia, como el lugar donde Su presencia habita, nos llama a vivir según Sus principios de amor, perdón y justicia. Al integrar estas virtudes en nuestra vida diaria, reflejamos el carácter de Cristo, y cada acto de bondad y justicia revela Su carácter.
  • Reflejar el carácter de Jesús en cada acto cotidiano: Vivir en intimidad con Dios no se limita a la oración, sino que se refleja en cada acto diario. Cada palabra, gesto y pensamiento puede mostrar el amor, paz y justicia de Jesús.

Pasos prácticos para desarrollar el principio con la comunidad:

  • Sirviendo en amor: Cuando decidimos servir, cubriéndonos en oración, que nuestra familia, amigos y vecinos puedan ver cómo nos conducimos entre nosotros en amor.

 

  • Siendo el reflejo de Cristo: Juntos podemos, con la ayuda del Espíritu Santo habitando en nosotros, que nuestra vida sea un reflejo del amor, el perdón, la justicia y la honra a nuestro Dios.

“Si la construimos, Él la habitará”:

“El propósito de edificar la casa no está solamente en lo que sabemos, sino en lo que hacemos y somos en Dios.”

Oración:

Oramos para que en tu casa constantemente manifieste tu amor, perdón justicia y honra. Un lugar donde tu Gloria nos embriague, que empezando por cada uno de nosotros provoquemos que otros quieran vivirlo.

Motivos de oración

Durante este tiempo especial de ayuno y oración, queremos enfocarnos en buscar a Dios de manera intencional y con propósito. Para ello, hemos preparado una lista de motivos de oración que nos ayudarán a alinear nuestros corazones con Su voluntad y a interceder por áreas clave en nuestras vidas, en nuestra comunidad y en la iglesia global.

Personal

Oramos para que el Señor nos traiga una mayor profundidad en el entendimiento de ser una casa espiritual que refleja el carácter de Cristo por medio de actos de bondad, perdón y justicia. (Efesios 4:32, 1 Pedro 2:5)

Comunitario

Oramos para que, como iglesia, se nos revele nuestra identidad como casa de Dios, viviendo conforme a lo que está escrito en Su Palabra, siendo formados, discipulados y aprendiendo a vivir según el corazón de Dios. (Salmos 25:5, 1 Juan 2:6)

Global

Oramos por todos nuestros hermanos de la fe, para que todos podamos seguir creciendo en el carácter de Cristo, siendo formados y moldeados a Su misma imagen, creciendo en obras de justicia, compasión y honora los unos a los otros. (Romanos 8:29)

TIEMPO DE INTIMIDAD:

Te invito a un tiempo de intimidad con Dios, donde podrás hablar con Él, escuchar Su voz y meditar en Su Palabra. Es un espacio para rendir tu corazón y permitir que Su presencia transforme tu vida. ¡Ven y acércate más a Él! A continuación, te brindamos el enlace para un tiempo de adoración que te ayudará a entrar más profundo en Su presencia.

 

1 Comment

  • El amor a nuestros hermanos, independiente de quien sea, debemos amarlos y ayudarlos cuando lo necesiten, respetarlos y rratarlos con mucho amor como Jesús nos enseñó.
    Ser transparentes y sinceros, así construimos y hacemos que el mundo sea mejor

Leave a Comment